Butaca numerada
José Antonio Añón - jose.anon@wanadoo.es

A la espera que alcancemos la temporada de estrenos de otoño, que visto las primicias, parece ser que van a venir cargadas de interesantes largometrajes, de momento nos tenemos que conformar con una serie de títulos, que van desde la acción hasta la comedia romántica, pasando por el thriller nacional, el cine fantástico para todos los públicos y el clásico habitual, pero no olvidaremos un género al que adoro, el de gansters. Con ello comienzo.

Enemigos Públicos. Director. Michael Mann. Intérpretes. Johnny Depp, Christian Bale, Marion Cotillard, Billy Crudup, Stephen Dorff, Stephen Lang, James Russo, David Wenham, Christian Stolte, Jason Clarke, Branka Katic, Wesley Walker, Stephen Graham, Giovanni Ribisi, Matt Craven, Leelee Sobieski, Channing Tatum

Esta es la historia del legendario bandido de la época de la Gran Depresión, John Dillinger, carismático atracador de bancos que se convirtió en el objetivo número uno del recién creado FBI de J. Edgar Hoover y de su mejor agente, Melvin Purvis , y que termino como un héroe para el sufrido pueblo americano. Nadie era capaz de detener a Dillinger y a su banda. No había cárcel que se le resistiera. Su encanto personal y sus audaces fugas conquistaban a todo el mundo, desde su novia Billie hasta el hombre de a pie que no sentía simpatía alguna por los bancos que habían hundido el país en la depresión. Las aventuras de la banda de Dillinger, que posteriormente incluiría al psicópata Baby Face Nelson y a Alvin Karpis, entretenían a la mayoría, pero J. Edgar Hoover tuvo la idea de servirse de la captura del bandido para empezar a transformar su “Oficina de Investigación” en lo que sería el FBI. Convirtió a Dillinger en el “enemigo público número uno de América” y lanzó a Purvis, tras él. Hace tiempo que no se recreaba también el género de gansters en una película, basado en excelente vestuario, ambientación y una trama que te hace ser un fiel seguidor de Dilinger, y apoyar el fracaso más estrepitoso del FBI. Su larga duración no la hace tediosa en ningún momento.

Agallas. Directores: Samuel Martín Mateos y Andrés Luque Pérez. Intérpretes: Carmelo Gómez, Hugo Silva, Celso Bugallo, Mabel Rivera, Carlos Sante, Xavier Estévez, Isabel Blanco, Yoima Valdés, Rula Blanco, Tomás Lijó.

Sebastián, un delincuente de poca monta recién salido de prisión, decide buscar empleo en una pequeña empresa de Galicia. Pero no por vocación desde luego, sino porque algo le dice que el dueño de la empresa, Regueira, no se ha pagado el Jaguar con cangrejos. Mediante una astucia, se hace amigo de un encargado, Raúl, y consigue que le contraten. Regueira se lo cree sólo a medias, pero comprueba muy rápidamente que aquel joven de dientes mellados tiene agallas y decide convertirlo en su ayudante. Poco a poco, Sebas cambia de aspecto, se gana ropa nueva, nuevos dientes y sobre todo la confianza de su jefe. Parecerá haber llegado a la cumbre o casi. Pero, Sebastián, tan listo y despiadado, ignora que forma parte de un juego que le supera. Una historia fuera de lo normal dentro de nuestro cine patrio, en la que un actor, Hugo Silva, encasillado dentro de unas series concretas de televisión y con papeles muy limitados, rompe con los citados moldes y se sale con una interpretación muy realista. Por otra parte, tenemos a Carmelo Gómez, uno de los grandes actores contemporáneos españoles que siempre suele jugar sobre seguro.

Mi Vida en Ruinas. Director. Donald Petrie. Intérpretes: Nia Vardalos, Richard Dreyfuss, Rachel Dratch, Harland Williams, Alexis Georgoulis, Sheila Bernette, María Botto, Ralph Nossek, María Adánez, Rita Wilson.

Georgia es una joven divorciada que está desencantada con la dirección que lleva su vida. Trabaja como guía turística en una agencia de viajes griega, donde tendrá que lidiar con un alocado grupo internacional de turistas más interesados en comprar bizarros souvenirs que en visitar monumentos. Mientras intenta que presten atención a las maravillas de la Grecia antigua, ella misma comenzará a ver las cosas de otra manera, ya que el amor puede aparecer cuando menos se lo espera. La protagonista es la misma que llevo al éxito “Mi Gran Boda Griega”, pero creo que con esta comedia, no se le augura el mismo camino. Eso si, como visita a través de la pantalla de los principales tesoros helenos, cumple suficientemente.

Pequeños Invasores. Director: John Schultz. Intérpretes: Ashley Tisdale, Robert Hoffman, Kevin Nealon, Doris Roberts, Carter Jenkins, Tim Meadows, Gillian Vigman, Austin Robert Butler, Ashley Boettcher, Henry Young, Regan Young

La trama sigue las andanzas de los Pearson, una familia que llega a una casa para pasar unas merecidas vacaciones de verano. Los Pearson son Stuart y su mujer Nina, la pequeña Hannah de siete años, Tom, de quince años y fanático de la tecnología, y la hermana mayor Bethany, que sale en secreto con el joven Ricky Dillman. Sin embargo, su periodo de descanso se verá alterado por Sparks, Skip, Spike y Razor, cuatro alienígenas que llegaron antes que ellos. Será entonces cuando los miembros del clan unirán fuerzas con un único propósito, echar a los pequeños y belicosos intrusos que viven en su ático. Otra de las atracciones para compartir entre niños y adultos, y pasar entretenidos un buen rato.

Una Noche En La Ópera. Director. Sam Word. Intérpretes: Groucho Marx, Harpo Marx, Chico Marx, Margaret Dumont, Kitty Carlisle, Allan Jones, Sig Ruman, Walter Woolf King, Edward Keane, Robert Emmet O’Connor, Lorraine Bridges

Otis B. Driftwood es el representante de una acaudalada viuda llamada Mrs. Claypool que quiere ejercer de mecenas en una opera para así poder codearse con la alta sociedad. Para conseguirlos Driftwood le presenta al empresario Herman Gottlieb, quien desea que Mrs. Claypool financie la ópera con el protagonismo del famoso y arrogante tenor Rodolfo Lasparri. Este, se encuentra totalmente enamorado de Rosa Castaldi quien le rechaza a favor de otro cantante de menor relevancia popular llamado Ricardo Baroni. Con estos argumentos parece que estemos ante una trama romántica de desamor, pero en esto que aparece Groucho, y embarca hacia Nueva York a las grandes estrellas de la Ópera de Milán, con dos polizones muy revoltosos a bordo, Harpo y Chico. Entre los tres revolucionan el barco, organizan un escándalo en Nueva York y convierten la noche del estreno en una locura que el mundo de la ópera nunca podrá olvidar. Una de las mejores obras de los Hermanos Marx, esta vez en trío ya que Zeppo no participó, recordada siempre por las escenas de la parte contratante, la del camarote lleno de personal, el cambio de camas en el hotel o el discurso de los falsos aviadores.