Charradicas
Miguel Ángel Royo Sorribas

Amanda, María Teresa y Mayra Alejandra son tres monjas colombianas de la Orden de los Hermanos de Nuestra Señora de Bethlehem, los llamados Betlemitas. Ellas se han pasado el mes de agosto pensando en Mas de las Matas, buscando fotos del pueblo en internet y leyendo nuestros foros desde Bogotá. Desde febrero están pendientes de asuntos burocráticos y de los permisos de residencia para venirse por fin a vivir en el convento de detrás de los corrales. El convento se quedó vacío en junio de dos mil ocho, y desde entonces mosén Alfonso se ha dedicado a buscar inquilinas. Primero en Aragón sin suerte. Después por toda España; todo era lamentar que no había vocaciones. Y al final se empezó a escribir a congregaciones de todo el mundo. Entonces llegaron respuestas positivas, y entre todas las candidatas y todas las delegaciones disponibles desde Filipinas a Colombia, se ha elegido a esta Orden, que hasta ahora solamente tiene sede en España en La Laguna, Tenerife. Y desde el cuatro de septiembre también en Mas de las Matas. Dice nuestro cura que se podría escribir un libro con todas las peripecias que ha pasado hasta conseguir por fin volver a dar vida a nuestro convento. Primero los españoles fueron a evangelizar América. Ahora la evangelización lleva el camino inverso.

María Jesús Gascón fue premiada con un bingo de seiscientos euros, y a Rubén Gascón Cañada, con once añicos le tocó el bingo gordo de mil doscientos euros, cuarenta mil duros libres de impuestos. Rubén además es un campeón del ping-pong y del tenis.

José Antonio Borruel recorrió el pueblo como Emperador de Roma, con dos concubinas haciéndole aire con plumas de pavo real porque hacía un calor tremendo durante el desfile de las carrozas. José Moliner Vivas estaba tranquilamente sentado en la entrada de su bar con su mujer cuando pasaron los Titiriteros de Binéfar y los coronaron reyes y se los llevaron de pasacalles haciéndoles reverencias. Emperadores, reyes y pronto volverá el comendador a dar vuelta.

Miguel Ángel Galindo Gomera de Andorra vino a torear al Mas y se llevó de recuerdo una cornada importante en el culo. Lo malo que tienen estas cosas es que se infectan enseguida y por eso le han tenido que poner mucho antibiótico. Pero ya está otra vez por el Ánfora sirviendo pizzas.

Pedro Serrano Mir murió en plenas fiestas. El recadero del Mas a Barcelona recorrió agosto como una de las peores noticias, primero por su fulgurante enfermedad y después por su fallecimiento. Y Jesús Garcés Esteban murió de un infarto con tan sólo cuarenta y dos años. Descansen en paz.

Clara Sisqués Salas nació en Lérida el jueves veinte de agosto, a las siete y treinta y dos minutos de la mañana, unas horas antes del chupinazo, y a las siete y treinta y cuatro ya le hacían unas fotos de recuerdo con sus padres, encantados del milagro de la vida. Su abuelo Antonio ya la lleva de salvapantallas en el móvil.