Siempre en primera fila. Por una cosa o por otra tu popularidad se desborda. Masina entrañable y seductora. Energía e imaginación materializadas en forma de mujer. San Antón, Santa Flora, la Iglesia, las fiestas y tu Mas tan querido. Cualquier ocasión es buena para manifestar tu colaboración y disposición a servir a tu pueblo, a los niños, a la gente.

Pero no sabíamos que además en Las Parras de Castellote te apreciaran tanto. Hasta el punto de nombrarte hija adoptiva y predilecta. Ese precioso pueblo del que tan solo nos separa una sinuosa carretera, o dos o tres horas de empinado camino que vale la pena recorrer. También allí has ido con espíritu de colaboración con su ermita y con su pueblo. Y por eso te han elegido y te han rendido un merecido tributo. A ti y a tu familia. ¡Enhorabuena!. Y que sigas así muchos años.