Aquellos lejanos días en que los uniformes hablaban raro

Edurne Guevara Zapata

Dejaron la memoria de su presencia en Mas de las Matas y en Aguaviva

Las Brigadas Internaciones son todavía motivo de cierta mitificación, sobretodo en los diferentes lugares donde estuvieron en la Guerra Civil Española. Nuestras tierras están plagadas de muchos de esos lugares en donde los extranjeros descansaron o ejercieron el odiado arte de la guerra para volver a ganar la libertad. Los de las Brigadas Internacionales defendían a la República, pero también muchos más extranjeros pertenecientes a ejércitos regulares de índole fascista lo hicieron con el mal llamado “bando nacional”. Aquí en territorio del Estado Español se dejaron la piel y la sangre, cuando no la vida.

En nuestras tierras hay recuerdo del paso de Brigadistas: canadienses y británicos en Mas de las Matas y ciudadanos de los Estados Unidos en Aguaviva, todos ellos, los unos y los otros, integrantes de la XV Brigada. Los que se alojaron en Mas de las Matas se hicieron fotos, la mayoría se conservan en Inglaterra y en el Museo de la Brigada Lincoln de New York; de los que se alojaron en Aguaviva se conservan “grafitis” en la Ermita de San Gregorio.

Los componentes de las Brigadas Internacionales llegaron de 54 países que pretendieron y ayudaron a la República en contra de las tropas golpistas de Franco y de los ejércitos regulares de Alemania e Italia o lo que es lo mismo Hitler y Mussolini, que ensayaron estrategias y recursos armamentísticos antes de provocar la II Guerra Mundial.

Muchos de los Brigadistas atravesaron a pie los Pirineos para entrar en territorio español y ayudar a la República. Su centro neurálgico se ubicó en Albacete, donde muchos empezaron la instrucción dado que venían de un mundo completamente ajeno a lo castrense. Antes de ser forzosamente retirados en septiembre del 38; los brigadistas combatieron en las batallas más importantes de la guerra civil: la defensa de Madrid, el frente de Aragón, Jarama, Guadalajara, Brunete, Belchite, Teruel y el Ebro.

Hay que señalar que algunos de ellos ya estaban en España y residían antes del golpe del 18 de Julio, procediendo mayoritariamente de países con gobiernos fascistas (o pseudo fascistas), de donde se habían visto obligados a exiliarse por su militancia progresista, de izquierdas, comunista, socialista, anarquista… Así había muchos miembros integrantes de las Brigadas de Alemania e Italia que ya estaban en España y que vivieron en primera persona estos acontecimientos, fueron los primeros extranjeros que apoyaron, sin más, a la República... Muchos extranjeros no se integraron en las Brigadas por discrepancias políticas. Éstos lucharon por la República desde unidades del POUM o en organizaciones disidentes y de izquierdas del Komitern.

A las Brigadas se unieron muchos atletas de la Brigada Popular que se desarrolló aquel verano del 36 en Barcelona.

La sede de reclutamiento se instaló en París y lo dirigían a la par el Partido Comunista Francés y el de la Unión Soviética. Los brigadistas ya entraban con toda la documentación cumplimentada desde París, según las peticiones que se “administraban” desde Albacete(al mando de la base estaba André Marty).

Como apunte final, aunque breve por mucho que nos pese, remarcar (antes lo hemos mencionado) que durante el transcurso de la Guerra un contingente de las Brigadas Internacionales, en su mayoría canadienses y británicos del Mac Paps, estuvo en Mas de las Matas. Hay una serie de fotos que dan testimonio de su paso y que se conservan en el Museo Lincoln de NY y en Inglaterra. Hay dos de ellas muy significativas: en una frente a la Iglesia posan unos brigadistas. La puerta del templo está semitapiada y se pueden observar las pintadas en las columnas; la otra es una espectacular foto de la fachada de la Iglesia...ellas son la memoria gráfica que podemos arrancar de aquellos días--- estas fotos se pueden ver hoy en la Exposición Itinerante de la Brigada Lincoln y también en su catálogo---. Hay otras fotos que muestran a soldados posando en eras y en actitud siempre positiva....eran los días de la Navidad del 37, en vísperas del inicio de la campaña de la batalla de Teruel. Esto se refuerza con el testimonio de masinos que recuerdan a aquellos soldados que casi no se entendían entre ellos y que desbordaban un sentido del humor que contagiaba; los brigadistas montaron su cocina humeante delante del molino harinero.

Para saber más, desde el mundo de la literatura y libros de ensayo, os recomendamos:

“Brigadistes entre nosaltres” de Ángela Jackson.

La odisea de la Brigada Lincoln de Peter N. Carroll.

Catálogo de la Exposición que organiza Amarga Memoria sobre el paso de la Brigada Lincoln.

Brigadas Internacionales. Cartas desde España. Brigadistas del gran Manchester en el Batallón Británico de la XV Brigada

Canciones de las Brigadas Internacionales

Brigadistas, el archivo del General Walter.