Charradicas
Miguel Ángel Royo Sorribas

Voy a hacer varios llamamientos a la población, aprovechando este medio de comunicación con tantisma audiencia.

En primer lugar, me dicen que ponga que se busca monja. Si hay alguna monja por ahí que no sepa a donde ir, que se venga pronto al Mas porque nos hace falta una. Resulta que desde que se marchó la Herminia, sólo nos quedan dos, la Merche y la Asun. Para que pueda permanecer abierto el convento hacen falta que sean tres. Las dos que aguantan estarían encantadas de que apareciera otra, porque si no el pueblo tendrá pronto un convento vacío. Hay goludos que preferirían una de clausura que sepa hacer yemas y esos dulces tan divinos. Otros preferirían una que sea jovencica que sepa llevar la Citroën como Gracita Morales. En fin, que con lo que sea nos conformaríamos, pero tendría que venir muy pronto. Después de la rogativa por los espeleólogos que se resolvió tan rápido, se están haciendo ahora peticiones para que se nos envíe una hermana y a la vez ya puestos, se pide también para que llueva y para que el Ayuntamiento pueda pagar pronto sus deudas. Don Eugenio ha encontrado unas rogativas populares del siglo XVIII, y se van a poner en práctica durante estos días a ver si todavía funcionan. Por lo visto en tiempos del comendador también venían sequías gordas y también se echaba mano a las soluciones sobrenaturales. Los gaiteros la interpretarán con la dulzaina, y se cantan los siguientes versos:

¡Oh, Santa Flora bendita!
Tú que tienes el poder
Rompe el candado a las nubes
Para que se eche a llover.
¿Quién será esa señora
que va vestida de blanco?
Es Santa Flora bendita
Que va regando los campos.
¡Oh, Divino Cristo Dios
y hombre verdadero!
Riega nuestros campos
Y alegra nuestros consuelos.

Contra más se desafine más efectividad, dice la tradición.

De momento se va a poner panizo en la huerta, porque ENDESA apenas compra agua, pero la cebada ya está toda cosechada. Lástima haber pregonado con esas coplas durante todo el invierno. Como nos funcionen las hemos de traducir al catalán para que las canten en Barcelona.

El siguiente llamamiento es para todos los que hacemos cuarenta años durante este dos mil ocho, y también para todos los que vinieron a escuela con nosotros. Se quiere hacer una cena el próximo día nueve de agosto para rememorar viejos tiempos, cuando íbamos con Doña Pabla, con Doña Mercedes, con Don Paco, con Doña Tere, con Don Rogelio, con Don Gil o con Don Eugenio. Curioso que con la cuadrilla que éramos no saliera ni una sola pareja estable. Podéis pedir información sobre el evento en el GEMA o preguntarle en la gasolinera a la Eva, y de paso felicitarle por las vidrieras tan majas que ha hecho para las ventanas del coro de la Iglesia. En una sale el espíritu santo y en la otra el ángel de la guarda, que vigilan la plaza, ahora que se ha vuelto a quedar sin bar.

La nieta del Rifaterra, Sofía, está muy bonica. Con solo tres meses ya sale retratada en el fotolog más veces que nadie.