Editorial

Este mes dejará atrás un año difícil para el Grupo de Estudios Masinos y para todos aquellos componentes que se implican en un proyecto que trabaja por el Mas de las Matas, aunque no todos nuestros conciudadanos lo vean así. No importa el GEMA sigue adelante y al final los frutos van saliendo; aún con cortapisas.

Decíamos al principio lo de un año difícil porque se han producido profundos cambios en el seno del GEMA y porque muchos de nuestros proyectos e iniciativas han tomado mucha más fuerza y eso implica trabajo, decisiones, reuniones, discusiones. El resultado es que hemos dejado atrás un año muy bueno, aunque a veces necesitaríamos más aliento, más comprensión y mucha más implicación empezando por muchos de los miembros pasivos del GEMA.

Nuestro Grupo nació para impulsar nuestro pálpito cultural y para hacer que se reconozcan todos nuestros patrimonios que, a menudo, pasan desapercibidos; con los mismos propósitos seguiremos adelante, pero insistimos necesitamos y precisamos de la participación y de la crítica valiente y constructiva.

También ha sido el año del 25 Aniversario de El Masino y, sin parar, hemos emprendido la aventura de ir más allá conquistando nuevos aniversarios con una publicación de y para los masinos. Gracias por leernos.

En este año la fiesta del Regreso del Comendador nos ha colmado de alegría; creemos que gracias a todos vosotros la fiesta se supera año a año. Otra vez, por todo ello gracias.

Bien, os tenemos que dejar. Hay mucho trabajo que hacer y muchas ilusiones que no queremos defraudar.