Jornadas del Geoparks en el Mas gracias al GEMA
Edurne Guevara Zapata

I.

El Grupo de Estudios Masinos ha organizado, bajo el paraguas del Parque Cultural del Maestrazgo, las jornadas anuales Geopark para Mas de las Matas. Estas jornadas tienen, normalmente de protagonistas, el primer fin de semana de Junio...pero aquí en el Mas de las Matas, gracias al trabajo del Grupo de Estudios Masinos, se preparó un calendario ambicioso con propuestas que viajan desde las charlas hasta las salidas al campo donde la experiencia en directo, las explicaciones de los expertos y la posibilidad de poder “palpar”los nuevos conocimientos recién adquiridos en “vivo y en directo”.

Víctor Hernández en la charla del 1 de junio.

El GEMA ha contado con la colaboración del entusiasta geólogo, miembro del Grupo de Estudios Masinos, Víctor Hernández que preparó varias charlas precedentes a las salidas excursionistas.

En la primera charla que rompía las jornadas GEOPARK en Mas de las Matas, Víctor Hernández nos habló de la formación y existencia de dolinas, simas, cuevas...definiendo en primer lugar el “karst”, para a partir de ahí desarrollar todas las explicaciones que acabaron captando, mayoritariamente, la atención de los interesados miembros del Club de Espeleología Ocho (integrado en el GEMA) que se dieron cita en esta primera charla.

Las jornadas fueron abiertas por Javier Díaz, destacado miembro del GEMA que explicó qué eran las jornadas del 1 al 17 de junio con charlas y excursiones guiadas. En España, bajo el auspicio de la Unesco, hay cuatro Geoparks: aquí en Aragón en el Parque Cultural del Maestrazgo y en el Sobrarbe; en Andalucía en la Sierra Subbética y en el Cabo de Gata.

El Club de Espeleología Ocho haciendo una demostración en la Sima Pequeña de La Ginebrosa.

Víctor Hernández nos acercó a los procesos que origina el agua al entrar en un macizo calcáreo... simplemente por la propiedad de disolución que tiene el agua... sobre sales, yesos, calizas y conglomerados. La charla hacía hincapié en el nivel freático que tanto influye en el mundo de la geología y en la mágica influencia que imprime el agua en ellas.

Casi todas las formaciones de nuestra zona pertenecen al Cretácico Superior, aunque los “más interesantes” se encuentran en el Jurásico Inferior.

La salida a las simas de La Ginebrosa y a la Dolina tuvieron lugar el domingo 3 de junio, contando con la colaboración del citado Club de Espeleología que montaron en la Sima Pequeña todo un intrincado para que los que fueran a la excursión pudiesen bajar a la misma con la supervisión de los espeleólogos.

Marchamos pues hacia el término municipal de La Ginebrosa, en la partida reconocida como “las masadetas”, cuya referencia puede ser el Puente del Arenal con el Bergantes y las masadas a la izquierda en la curva.

Jorge Mampel descendiendo por la sima.

Allí nos encontramos muy cerca unos elementos de otros, con dos dolinas (una mayor y otra menor) y con dos simas (también diferenciadas por su tamaño y por otras características geológicas). Pero primero nos desplazamos a la sima pequeña donde ya encontramos a Eduardo y Joaquín Mir con Mapi Gil instalando el entramado sistema por el cual nos enseñarían cómo bajar al fondo de esta sima e invitarnos a que los que quisiéramos lo pudiésemos hacer.

El sol, personalmente, me fue recargando unas pilas internas que empezaron a hacer que despertarse de un letargo de horas robadas al descanso.... así que me pilló “hiperactiva” cuando sonó la sutil propuesta de bajar a visitar la sima pequeña de las masadetas de La Ginebrosa. Al cabo de poco ya estaba equipada para bajar por la Sima.... mejor dicho para que me bajaran y me subieran, bonita forma de ir por la vida a tomar nota para escribir “articulillos” como éste. Mientras tanto el resto de integrantes de la jornada matutina me dejaron sola con los chicos del Club de Espeleología Ocho.... Una de dos o se resistían a asistir a un espectáculo bochornoso viéndome a mí en un ataque de risa motivada por una especie de miedo o viéndome triunfar y así viéndose en la situación de apuntarse a la aventura.... Lo cierto fue que, en cuanto me quise dar cuenta, mis compañeros y compañeras de excursión ya no estaban allí.... se marchaban dedicándome la mejor de las sonrisa, el saludo de la comprensión y unas sinceras, pero temblorosas...”buena suerte”. Mi “yo interno” se reía tímidamente.

Llegó el momento, me acerqué al punto de salida; Joaquín Mir me aseguró a su arnés y nos desplazamos al punto donde Eduardo me descendería para hasta donde estaba Mª Pilar y Héctor (otro destacado miembro del Club Ocho, que había llegado un poco antes). El descenso es pausado y voy viendo la formación de la sima pequeña... las ”caricas” que me esperan abajo se van acercando y las voces de arriba se alejan, aunque se siguen oyendo perfectamente. Llego abajo y los dos atentos espeleólogos me desatan y me enseñan el lugar....un basurero donde lo que más predominan son esqueletos varios y variados, ya descoloridos y afectados por las diferentes perturbaciones que descargan después de la muerte.; pero hay otros seres vivos que allí presentes incomodan, las pulgas. Así que la consigna es salir lo más pronto posible de allí. Para mí es fácil porque sólo tengo que hacer lo que me van indicando los expertos del Club de Espeleología Ocho...ellos ponen el motor. Llego arriba y me reafirmo en la idea de que todo ha sido una experiencia que ha valido la pena y que espero poder repetir...aunque me gustaría no dar tanto trabajo a las fuerzas de los espeleólogos...bueno, tiempo al tiempo.

Eduardo Mir "colgado" de la Sima Pequeña de La Ginebrosa.

Mientras tanto, el grupo ha llegado a las dolinas y a la sima grande que, es verdaderamente, lo más espectacular de la excursión, geológicamente hablando. Víctor Hernández va dando sus explicaciones y dirige las atenciones y las miradas de los integrantes de la excursión allá donde el estudio geológico se pone interesante.

Para los que somos casi huérfanos en estas nomenclaturas, utilizadas en el día a día de la geología y la espeleología, recordaremos que una dolina es un tipo especial de depresión geológica característica de los relieves kársticos y una sima es una cavidad que se abre al exterior mediante un pozo, o una boca que se conduce de forma vertical. Una sima es el resultado de un proceso erosivo kárstico en una roca calcárea...de todas formas también puede ser resultado del derrumbe de un techo de una cavidad en la que el agua se infiltra en cavidades inferiores...muchas simas son el resultado de la degeneración de una dolina. Así se entiende que en donde se encuentren dolinas pueden verse simas y viceversa. Hablar de sima o dolina es estar atrapado en una fina franja...

Para finalizar el día nos desplazamos al Mas del Comendador donde visitamos el paraje natural, nos enteramos de su peso en nuestra historia y de su entorno que esconde no pocas “leyes geológicas”.

II.

La segunda charla tuvo lugar el viernes ocho de junio cuando se acercó a todos los presentes a los espacios naturales que rodearon, influyendo, en la muy mencionada Batalla de Belchite. Al día siguiente se organizó una vista por los lugares que propiciaron una de los más míticos enfrentamientos entre amotinados (llamados nacionales) y defensores de la República. Los que quisieron unirse a la visita se acercaron hasta Lécera desde donde se partió con el investigador y experto en esta batalla, Jaime Cinca, hasta los diferentes enclaves que cobraron importancia en el devenir de aquella batalla enmarcada dentro de la Guerra Civil.

La visita a los parajes de la guerra en Belchite estuvo guiada por Jaime Cinca quien pudo gozar de explicar todo el contexto, sobre el terreno, de la batalla de Belchite que terminó rompiendo el frente de Aragón.

Los visitantes, mimados por Cinca, visitaron los enclaves importantes de la batalla; empezaron por la posición del Mojón Lobo, en término de Almonacid de La Cuba, desde el que los republicanos bombardeaban Belchite. Es un vértice en el que excavaron un túnel con una entrada posterior y cuatro bocas frontales en lo que colocaron piezas de artillería. Después se desplazaron a la Estación de La Puebla de Albortón en el antiguo ferrocarril Zaragoza-Utrillas, que fue tomada por los republicanos, después de una ardua batalla. En Fuendetodos (cuna de Goya) visitaron dos parajes: los búnkeres nacionales en Fuendetodos en el límite con el término de Jaulín, con un búnker grande para artillería y otros cuatro más pequeños para ametralladoras y fusiles; además se acercaron a las trincheras y restos de búnkeres republicanos en Fuendetodos.

Belchite tiene una Ermita dedicada a la Virgen del Puedo que fue tiroteado, bueno nuestros amigos pudieron, también, visitarlo.

En Lécera se están restaurando los cañones utilizados en la batalla, éstos pudieron ser tocados y contemplados por los visitantes de Mas de las Matas.

Artillería de la batalla de Belchite. Se puede ver en Lécera.

Después Cinca les acompañó a las posiciones nacionales en la Paridera del Saso (Belchite) frente a Codo, con su conjunto de galerías y refugios intercomunicados. Los penados políticos y republicanos ocuparon en Belchite una especie de “urbanización” (casi un pueblo aparte), conocida como Campo Rusia.

Se sube, finalmente, a la posición del Calvario frente al pueblo y después, casi emocionante, de forma pormenorizada al pueblo viejo de Belchite.

La batalla de Belchite.

La batalla de Belchite tuvo lugar entre el 24 de agosto y el 6 de septiembre de 1937. Una batalla a finales de verano que no fue decisiva, aunque si una maniobra de distracción.

Se enfrentaron 80.000 hombres, por el bando republicano, con el apoyo de 90 aviones (formadas por tres escuadrillas) y 105 T-26 al mando del general Sebastián Pozas Perea. El bando sublevado hizo frente a esta ofensiva republicana con 5 Divisiones.

Objetivos militares, pero también políticos.

Lo político.

La decisión de realizar esta ofensiva global en la zona de Belchite no sólo tenía connotaciones militares. Las tenía mucho más allá, enmarcadas en la política.

Fijémonos en los antecedentes que atraen la atención, posteriormente, sobre Aragón: Después del fracasado intento de tomar Brunete el gobierno republicano, con Negrín por presidente y con Prieto como ministro de Defensa, decide llevar a cabo una ofensiva en Aragón. Con el objetivo de ralentizar el avance de las fuerzas sublevadas (llamadas nacionales) en el frente del norte, donde ya habían tomado Santander.

En lo puramente político: así los nacionalistas y anarquistas catalanes se quejaban de que el gobierno central no prestaba atención al frente de Aragón, a su vez el gobierno central estaba preocupado por la influencia de los anarquistas y del POUM en la zona, donde el Consejo de Defensa de Aragón, presidido por Joaquín Ascaso, funcionaba en la práctica como un gobierno independiente. La solución, según el gobierno central fue la introducción de fuerzas comunistas y la incorporación de tres divisiones anarquistas a la disciplina del recién creado Ejército del Este, al mando del general Pozas y así poner fin a esta influencia anarquista. Eso se consiguió.

Lo militar.

El bando republicano, con el general Pozas, lanza un ataque simultáneo por tres puntos fundamentales y cinco secundarios en dirección a Zaragoza.

En el frente del norte y en el del centro solo se logró ocupar terreno vacío. En el frente sur las poblaciones de Quinto, Mediana y Codo cayeron enseguida en poder del ejército republicano, mientras que Belchite, donde la resistencia de los nacionales sitiados fue considerable, resistiendo hasta el día 7 de septiembre.

La ofensiva republicana fracasó porque en lugar de avanzar sobre Zaragoza, las fuerzas republicanas se concentraron en tomar Belchite que había formado una bolsa en medio del territorio republicano. Esto produjo un retraso considerable que dio lugar a que los nacionales pudieran reforzar sus posiciones y el frente quedara estabilizado.

Antes de la ofensiva republicana los nacionales solo disponían en la zona de tres divisiones, la 51ª, la 52ª y la 105ª, desplegadas a lo largo de los 300 Km. de frente, con la mayoría de las tropas concentradas en ciudades.

Los efectivos nacionales tras el comienzo de la ofensiva se componían de: cinco divisiones al agregarse también la 13ª y la 150ª, que fueron retiradas del frente de Madrid. La contraofensiva de los sublevados se inició respondiendo con rápidos reflejos. Era el 30 de agosto y acabó el 6 de septiembre, coincidiendo con la rendición de los defensores nacionales de Belchite, al ser tomada esta población por los republicanos

Los únicos éxitos nacionales fueron el derribo de cinco I-15, puesto que no se lograron traspasar las posiciones republicanas en Mediana y Puebla de Albortón.

En resumen: se ganó algún territorio y la contraofensiva no traspasó sus líneas, el resultado en modo alguno podía considerarse satisfactorio para el gobierno. El ministro de la defensa, Prieto, le escribía al general Pozas, diciéndole: «Tantas fuerzas para tomar cuatro o cinco pueblos no satisfacen al ministerio de Defensa ni a nadie».

Por otra parte, no se consiguió tampoco el objetivo de ralentizar la ofensiva nacional en el frente del Norte.

Visitas que levantan...

Belchite se alza, en el siglo siguiente a la guerra civil, como resistente, persistente, sumergido todavía en el primer día de silencio después de la batalla... su aspecto es desafiante. Pisamos sus calles, su polvo se levanta después de esculpir nuestra huella.... No hay barro, sólo atisbos de lo que ayer fue una intensa temporada de lluvias. Los boquetes, ocasionados por la artillería, producen cierto desasosiego...miro uno de ellos, no sé si lo ocasionó un disparo republicano o uno de los efectuados por los rebeldes franquistas. Me produce tristeza e intento saber cómo se sentían las gentes de esta población en los asedios que sufrieron... no lo puedo imaginar, no soy nadie para ponerme en su piel...aquí soy un ser insignificante. En esta visita, casi solitaria, hay silencio mientras una ligera brisa sacude y juega con los boquetes, agujeros, calles deshabitados, edificios derruidos y entonces se produce un canto casi desconocido... es el aire que transita por estos lugares. Siento una especie de tristeza y entonces pienso en el dolor de los vecinos de Belchite, en su miedo apretado y escondido....en la búsqueda de la tranquilidad y veo a los soldados disparar a otros soldados... sin tener ninguna trifulca entre ellos, ni se conocen... aunque puede que se cruzasen antes de la batalla o después de ella.

El sol, en el 37, debió apretar mucho dejándoles, casi sin aliento... con los labios apretados, blancos, gastados y casi maltratados...la lengua duplicada, la saliva espesa y la mente dando vueltas a lo mismo...agua que acaricie los labios. Me contaban que, generalmente, la sed es peor que el hambre.

Belchite quedó, después de unos cuantos años, desierto de abuelos que se sentaran a repasar su vida; de mujeres comprando, barriendo la acera, hablando en corros; de abuelas haciendo ganchillo mientras recordaban lo lejos que llegaban sus hijos....

Y los zagales corriendo, saltando, brincando por las calles y plazas de un pueblo que los vio nacer; mientras tanto sus hermanos mayores van a buscar a las chicas que se sientan en la plaza a la sombra de las moreras hablando del vestido del domingo, del baile y del mozo que la sacó en un baile más apretado de lo normal...

En Belchite, hoy, ya no hay ni gatos deambulando buscando comida....puede porque no la haya, pero no hay ni ratoncillos, delgados y escuálidos. En Belchite sólo quedan ladrillos, polvo, recuerdos, miedo y cierto sabor a tristeza quemada.

III.

El viernes 15 de junio tuvo lugar en la sala audiovisual de la Casa de la Cultura de Mas de las Matas una charla sobre qué es y qué representa la Fundación Dinópolis. La charla la dio a todos los asistentes el paleontólogo de la Fundación, Luis Mampel.

Se explicó en la misma: cuál es el papel de los paleontólogos, las misiones y características del mundo de la paleontología. Una charla muy entretenida y que nos desveló los aspectos ignorados que hay detrás de los fósiles expuestos en cualquier de nuestros museos.

Los excursionistas masinos en el nacimiento del Guadalope.

La última jornada Geopark organizada por el Museo de Mas de las Matas en la presente edición consistió en una excursión al alto Guadalope.

El primer enclave a donde nos dirigimos fue el nacimiento del río Guadalope. De camino a ahí veíamos a lo lejos Allepuz (que tiene una Casa Palacio digna de una visita, casi expresamente). También divisamos uno de los primeros afluentes del Guadalope, el río Alfambra y más a lo lejos la Sierra de Gúdar, lugar imprescindible para aquellos que gusten de practicar el senderismo.

Una de las señales de que llegamos es nuestra estancia en el puerto de Sollavientos que da nombre a toda esa zona y nuestro paso por el Mas Quemado hoy lugar de descanso, hostal, restaurante…Esta zona de Sollavientos es un punto convergente de nacimiento de ríos.

Llaman la atención la variedad de colores en los campos que nos rodean. Caminamos un poco y llegamos al nacimiento del río que kilómetros más al norte pasa por nuestro pueblo, Mas de las Matas. Mientras una suave brisa mece los campos unas vacas nos miran desde lo alto de una loma…hay también un par de toros que no nos miran tan bien.

Disfrutamos un poco más de este entorno que nos acoge con una quietud más segura, acompañándonos de nuestras pretensiones. Desayunamos y hablamos distendidamente. Volvemos para bajar hasta Villarroya de los Pinares….en el viaje de bajada podemos divisar la punta de alguno de los pilones que eran la señal de enlace y comunicación entre Allepuz y tierras del norte de Castellón, Morella. Estos pilones “guiaban” a los ganados, cada año, en las épocas de trashumancia…el colorido de los campos sigue ocupando una parte importante de nuestra atención visual y de los comentarios.

Estos pilones están más abundantes y espesos entre Allepuz y Vilarroya de los Pinares….después se dispersan y la dispersión es más evidente cuanto más nos acercamos a tierras de Aragón.

El personal más joven se mostró muy atento. Se trata del Centro de Interpretación de la Orden de San Juan en Villarroya de los Pinares.

Villarroya de los Pinares fue un bastión de la Orden de San Juan de Jerusalén; quizás por eso dispone de un muy buen Centro de Interpretación que nos explica qué fue y qué signito la presencia de esta Orden en estas tierras. Una de las consecuencias del paso de la Orden y de sus compensaciones son las muy numerosas masías, muchas de ellas fortificados.

Además del centro, Villarroya es mucho más; destaca su torre defensiva, que hoy es campanario, pero que se encuentra separada de la Iglesia…. Después paseamos alrededor de la Casa de Peña, majestuosa, magnífica, por desgracia un tanto desangelada, solitaria….aunque, creo que solícita. Es Casa Peña, propiedad del personaje más relevante que ha dado esta pequeña villa turolense. Fue éste Francisco Peña Calvo, que marchó a Roma para convertirse en religioso y que ya no volvió vivo a su pueblo, aunque dijo, siempre, que quería yacer en él. Su palabra se cumplió.

Monseñor Peña llegó a ser uno de los religiosos más importantes en la Santa Sede (además de desempeñar el cargo de Auditor de la Rota)….hoy descansa en una cripta en el interior de la Iglesia, templo que tiene un vistoso ábside mandado a construir por él. La Iglesia está significada por dos estilos: el gótico y el renacentista.

Se puede visitar Villarroya de los Pinares en muchos rincones de nuestro calendario, eso sí aquí el invierno es muy duro y esto debe tenerse en cuenta a la hora de hacerse a la carretera. No faltan, en esta pequeña Villa, festividades muchas de ellas relacionadas con los animales: se trata de San Antonio (con hogueras ante las casas y las masías). Sus tres fiestas principales son las de San Benón, la feria de San Juan y la romería en la Ermita de Santa Isabel enclavada en el valle de Sollavientos.

El término de Villarroya de los Pinares es intrincado, abrupto y acompasando…muy bien acompasado por la irrupción humana en forma de masías en el campo. Luego está la villa, ésta se encuentra enclavada entre tres colinas…destaca, como ya hemos dicho, su torre. La villa recibe la visita de tres riachuelos.

Villarroya de los Pinares gracias a sus variados estilos arquitectónicos y a las diferentes tipologías tradicionales, fue declarada en 1982 Conjunto Histórico Artístico.

Imprescindible visitar el Centro de Interpretación de la Orden del Hospital en esta villa del Maestrazgo Turolense. Podremos ver lo que era una cárcel y lo que fueron varios habitáculos de la orden Sanjuanista...

De Villarroya de los Pinares nos desplazamos a Miravete de la Sierra.

Un rincón tranquilo e idílico en Miravete de la Sierra.

Esta Villa se sitúa muy cerca del nacimiento del Guadalope, allí en el tramo alto de este río que en Mas de las Matas sentimos tan nuestro. Cuando visitas este pueblo sabes que en invierno tiene que hacer mucho fresco….aún así este pequeño núcleo urbano apasiona. La Villa cuenta con tres declaraciones BIC (Bien de Interés Cultural). Es imprescindible visitar la plaza Mayor, la plaza de la Iglesia y la Iglesia dedicada a Ntra Sra. de las Nieves.

Pero además los amantes y estudiosos de los fenómenos paleontológicos pueden visitar las ictitas que son las huellas fosilizadas que dejaban los dinosaurios en lo que hoy es el término municipal de Miravete.

A lo alto se pueden ver las ruinas, por desgracia muy pocas, de una antigua fortificación musulmana.

Llama la atención, lindando con la Iglesia, un pórtico en forma de “L” que es parte del Ayuntamiento. Pero hay mucho más a visitar en Miravete: su trinquete en la lonja del Ayuntamiento; su maravilloso y muy vistoso puente del siglo XVI; el molino que todavía conserva la acequia y la balsa de abastecimiento; la cruz de término, esculpida sobre piedra en mitad del siglo XV; la Ermita de San Cristóbal; una casa señorial, Casa Cavero; la Casa Rectoral de tres pisos y pegada a la Iglesia, hoy destinada a la hostelería, edificio que data del XVI; también destaca el horno comunal, del siglo XVI con dos grandes arcos de medio punto y que funcionó hasta mediados los 70.

Un pueblo, como los de alrededor, que da para mucho más y eso que no hemos entrado en los parajes de especial interés que lo rodean.

En Aliaga el Centro de Visitantes del Parque Geológico nos acoge con el mundo de la paleontología. Los más pequeños tienen rincones donde jugar a ser investigadores...

Nos desplazamos, después a Aliaga donde el paisaje geológico le da un carácter más que importante. Un pueblo, con sus pedanías, de carácter.

En la actualidad Aliaga tiene unos 450 habitantes….pero su pasado tanto social como humano tiene un gran peso histórico. Tiene también patrimonio como el Castillo del siglo XII. Una fortaleza impresionante de 4000m2 de superficie, con ocho torreones circulares y una llamativa torre de vigía. El visitante también debería visitar el Ayuntamiento cuyos arcos, en la lonja, son verdaderamente dignos de admiración, la Iglesia Parroquial, el puente que viaja de la época romana a la actual y que cruza el Guadalope y el Santuario de la Virgen de la Zarza.

Además Aliaga tiene cinco pedanías: Campos, Cirugeda, La Cañadilla, Aldehuela y Santa Bárbara…cada una de ellas con su particular historia.

De camino hacia Aliaga (desde Miravete de la Sierra) el paisaje natural nos ofrece un espectáculo de flora más que fascinante… los bosques de sabinas y enebros es un espectáculo. Seguro que muchos de los visitantes que se acercan a Aliaga nunca han vista tanta proliferación agrupada de estas dos especies. También se observan guillomos, gamones, pinares y los muy elegantes chopos cabeceros.

Nuestros excursionistas escuchando atentamente las explicaciones en el Museo Audiovisual.

Más que por los Centros de Interpretación de Aliaga (de los que hablamos a continuación) esta villa destaca por su entorno geológico, lo que le ha valido la llegada de muchos visitantes que visitan su Parque Geológico. Aliaga ostenta además el honor de ser el primero en construirse en España y uno de los más importantes de todo el continente Europeo.

Algunas de las formaciones geológicas que pueden verse son casi únicas en el mundo.. Así se pueden mirar de entender los últimos 200 millones de años.

El Parque lo pueden visitar, tanto científicos como turistas.

Pero en Aliaga se encuentran además dos Centros de Interpretación: el Centro de acogida del Parque Geológica de Aliaga, donde se analiza y se explica, de manera muy amena, lo que es el entorno geológico de Aliaga. En la pedanía de Santa Bárbara, en su Iglesia, se visita el Centro audiovisual y de interpretación de las minas de Aliaga… esta población fue cuna de varias explotaciones mineras y desde el centro de interpretación lo podremos entender.

Este centro de la minería es audiovisual y nos enteramos de la importancia que ha tenido, para esta población, la implantación de la minería y de la minería térmica

De Aliaga vamos a Hinojosa de Jarque donde contemplamos las esculturas artísticas diseminadas en su entorno, proporcionándole una personalidad exquisita y singular a este pueblo de la comarca de las Cuencas Mineras y perteneciente al Parque Cultural del Maestrazgo.

Las maquetas forman parte importante en el Museo de la Minería de Utrillas.

Nuestra última parada es Utrillas donde queremos visitar el recientemente inaugurado Museo Minero, situado en el antiguo convento- hospital de esta localidad en tiempos de la guerra civil.

El Museo son tres plantas superiores, además de la planta baja de explicación pormenorizada de lo que fue el mundo de la minería y su influencia en la sociedad de Utrillas. Los mineros son también objeto del análisis, de la observación y de la admiración de todos los visitantes bajo las explicaciones de la guía que nos acompaña sala a sala. Lo último que visitamos es una sala que nos proyecta un audiovisual en donde se da un repaso tan real como entretenido a lo que se ha ido viendo con anterioridad.

En resumen, estas jornadas Geopark han proporcionado a los asistentes y vecinos de Mas de las Matas más datos sobre el mundo geológico que nos rodea y lo han hecho de dos formas: los viernes con charlas y los domingos con excursiones para “palpar” las explicaciones en vivo y en directo.