Charradicas
Miguel Ángel Royo Sorribas

Un caso curioso del cambio climático sucede aquí todos los inviernos para asombro de los hombres del tiempo y de los meteorólogos de todo el mundo cuando les cuentas lo que pasa. Aunque nieve en el Mas, si vas más allá del puente nuevo comprobarás que allí ya no hace frío. Cuando se helaron los impeltes en el año cincuenta y siete, al otro lado del Guadalope dicen que tampoco hizo frío. Más allá del molinico no oirás decir nunca que haga frío; si acaso te dirán que fai fret.

Los quintos del 57 celebrando sus Bodas de Oro.

En el año cincuenta y siete fueron quintos una cuadrilla que se han vuelto a reunir durante estas últimas fiestas de sanantón. Todos con setenta años cumplidos hicieron una fiesta en el restaurante de la Aurelia; Serafín Garcés, Luis Oliveros, Ramiro Aguilar, José Arrufat, Antonio Royo, Eloy Gil, Atilano Mir, Rodrigo Aguilar, Delfín Pastor, José Mampel y Pedro Royo se juntaron para hablar de cuando eran pequeños, y recordar cuando iban a merendar con un duro a casa del Nicolás o a la taberna del tio Paco y de la tia Pilar, que tenían mucha paciencia con ellos cuando eran mozos. También rememoraron a los quintos que ya no están; Rodrigo Cabanes, Urbano Añón, Rodrigo Castañar y Valeriano Figuerola.

Como los que nos gobiernan discurren ecológicamente, dieron la orden de que los cadáveres de los animales muertos en las granjas tenían que ir a parar a unos contenedores, que después recogerían unos camiones para trasladar la carroña como si fuera basura hasta una incineradora para evitar enfermedades, con el consiguiente gasto para el ganadero en forma de seguro MAR o MER. Tanto han organizado los carnuzos que los buitres se han quedado sin su comida habitual que han devorado desde antes de que se inventara la ganadería. Ahora los buitres andan tan muertos de hambre que ya se cuentan casos de ataques a pastores heridos, a corderos pequeños o a alguien incluso que está durmiendo la siesta debajo de una carrasca y se despierta rodeado de cien buitres con ganas de comer. Algo hacen mal los ganaderos cuando esto les ocurre, opina el consejero Arguilé. Ahora el ullesqui y otras enfermedades se transmiten a través del camión que va de granja en granja. Para solucionar todos los problemas creados se podría proponer dejar todo como estaba antes.

En sanantón la charanga de Castellote vino al Mas y los dulzaineros del Mas fueron a tocar a Aguaviva. Sólo nos faltó que los de Aguaviva fueran a tocar a la hoguera de Castellote para acabarla de liar.

En el capítulo habitual de robos señalar que falta de su huerto la escalera metálica que siempre tuvo el Luis de la plaza, que en paz descanse a pesar de los lladres. También falta la escultura que recibió la plantilla de la residencia como premio a su labor. Estaba colocada en la recepción, y a alguien se le apeteció y la tendrá en su casa de adorno.

Felicitar desde aquí a Alberto Librado que trabaja ahora de guionista con el Gran Wyoming en El Intermedio de la Sexta. Y felicitar a Rosa María Serrano, que ha tenido a Violeta.