Clonar dinosaurios

Imaginar cómo era la provincia de Teruel y las especies que en ella vivían hace más de 100 millones de años a partir de los fósiles que encuentran los paleontólogos parece una tarea difícil, pero no lo es para Carmelo López Gómez, un ingeniero del Centro Politécnico Superior de la Universidad de Zaragoza que está recreando virtualmente los ambientes y los animales prehistóricos que poblaban la provincia. Su trabajo puede verse ya en la sede central de Dinópolis en Teruel y en el centro asociado de Mas de las Matas abierto esta primavera.

Carmelo López es el encargado de clonar los dinosaurios y otros animales prehistóricos que están apareciendo en Teruel a partir de los fósiles que se encuentran en los yacimientos paleontológicos, así como los ambientes y los paisajes en los que vivieron. Comenzó a hacerlo el año pasado dando vida virtual al saurópodo de Riodeva, que sigue perfeccionando conforme se conocen nuevos detalles de su anatomía, y poco a poco va ampliando la plantilla de dinosaurios y otros reptiles prehistóricos.

No es la primera vez que reconstruye dinosaurios. Con anterioridad ya había modelado dos dinosaurios para una empresa norteamericana, pero fue el año pasado cuando empezó a recrear las especies halladas en Teruel gracias a un convenio con la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis. Se trata de un convenio OTRI (Oficina de Transferencia de Resultados de la Investigación) que primero se firmó en 2005 y volvió a suscribirse para este año.

Gracias al mismo, se ha recreado y animado virtualmente el saurópodo de Riodeva que puede verse en el teatro virtual de la sede central de Dinópolis, al igual que el terópodo (dinosaurio carnívoro) y el estegosáurido (dinosaurio con placas, que aparecen en esta misma instalación).

La animación del saurópodo de Riodeva incluida en el documental que presentó recientemente la Fundación también es obra de Carmelo López, al igual que las cuatro recreaciones virtuales instaladas en el centro asociado de Mas de las Matas.

En estas recreaciones ha recurrido a dinosaurios modelados por él mismo, y a otros adquiridos debido a la premura de tiempo con que tuvo que realizar las animaciones. En cuatro pantallas diferentes pueden verse otras tantas escenas animadas de un minuto de duración, cada una sobre cómo era la vida en la era de los dinosaurios.

El Jurásico marino, el Aptiense, el Albiense y el Barremiense son las eras geológicas en las que son ambientadas las escenas. Ictiosaurio y tiburones en los ambientes marinos, o cocodrilos, dinosaurios y reptiles voladores en los terrestres, hacen viajar a los visitantes a tiempos pasados para comprender mejor cómo eran esos ambientes, inducidos a partir del registro fósil y las investigaciones de los paleontólogos.

(Diario de Teruel)