Presentación en Mas de las Matas del estudio elaborado por Cáritas

El primer día de diciembre del pasado año, pudimos conocer más a fondo la realidad del mundo rural en Aragón y, particularmente, la de nuestra provincia. En el Salón de Actos de la Casa de Cultura, Cáritas Teruel presentó un estudio sobre Presente y Futuro del Medio Rural en Aragón.

En la mesa y abriendo el acto, Consuelo Mateo, del Grupo Local de Cáritas, Magdalena Sancho y Mary Luz Micolau, técnicos de Cáritas Diocesana, Carlos Barragán, voluntario de Cáritas, Isabel Lecha, Consejera de Asuntos Sociales de la Comarca del Bajo Aragón, y Pascual Rubio, Director Técnico del Programa Revital desarrollado por la Diputación Provincial.

Como se intuye, a poco que leamos de nuestra provincia, las perspectivas del medio rural no parecen, en principio, halagadoras. Según el estudio, la baja densidad de población por la pérdida paulatina de habitantes en los núcleos rurales -salvo excepciones contadas-, el envejecimiento poblacional, las deficientes comunicaciones y la dependencia casi exclusiva del sector primario, osea agricultura y ganadería, condicionan, hoy por hoy, el futuro que comentamos.

Los que intervinieron en la mesa animaron a tomar iniciativas, a que los propios habitantes de ese medio rural no sean sujetos pasivos esperando que las circunstancias evolucionen favorablemente. Esto que se llama desarrollo endógeno, desde dentro, es ilusión, responsabilidad y perspectiva de la propia población rural, acompañada, eso sí, de una actuación coordinada de las distintas administraciones. Hay que valorar e identificarse con el concepto de vida rural que tiene sus contras, pero también sus pros, respecto al modelo de vida urbana a la que han marchado un elevado porcentaje de jóvenes de ambos, tras una ocupación estable, o buscando otros horizontes. También hay que ser solidarios con los que llegan de la inmigración y facilitar su integración, pues suponen un capital activo para la vida de muchos pueblos, aunque en algunas ocasiones surjan problemas y diferencias con los nativos.

Los asistentes fueron de distintas asociaciones y entidades de Mas de las Matas, entre ellas el Consejo Parroquial, Ayuntamiento, Cooperativa del Campo, Grupo de Estudios Masinos, Amas de Casa y Grupo Local de Cáritas, incluso alguna entidad bancaria. También los párrocos de Torrecilla de Alcañiz y Alcorisa, unos representantes del Grupo de Cáritas de Alcañiz, el alcalde de Foz Calanda y otras personas que no identificamos en aquel acto. En el ambiente se palpaba satisfacción por el planteamiento que puede suponer un nuevo impulso para el futuro del medio rural siempre que el estudio no se quede, como se apuntó en la decisión de Cáritas al encargarlo, en una documentación más que duerma en la biblioteca después de darla a conocer.

Dentro de un par de meses y para hacer efectivo el propósito de operatividad, Cáritas de Teruel pretende organizar una mesa redonda para ir especificando más las soluciones globales apuntadas. Con ello, quiere participar activamente en esa dinámica, objetivo que entra de lleno en el campo de su actuación, de una caridad globalizada u organizada, lejos de la clásica limosna o asistencia puntual, acción quizás útil en alguna ocasión pero pequeña, insuficiente hoy ante la globalidad de los problemas planteados.

Agradecemos a los masinos y bajoaragoneses que acudieron ese día por el calor que supone a la propuesta y por el ambiente de colaboración mutua que se detectó, en aras a solucionar un problema de futuro de este medio rural turolense y aragonés, un desafío inmediato en una provincia como la nuestra que aunque baja en habitantes y grande en extensión, conserva todavía muchos valores patrimoniales, paisajísticos y, sobre todo, humanos. Así, que adelante y hasta que nos veamos otra vez y comencemos a trabajar juntos, que es lo importante.