Según estimaciones propias, las Charradicas del mes de diciembre pasado las leyeron al menos seis personas. Por ejemplo Angelines Mir, la cual me dice que ponga aquí que se han disfrazado para el pan bendito las hijas de su sobrino Jesús, que se llaman María y Julia, igualico que las nietas de la Celia y del Agustín; Julia se llama así por su bisabuela Julia Virgós, que habría disfrutado mucho viendo como unas madrileñicas tan pequeñas formaban parte de las procesiones de sanantón en su pueblo, aunque fueran perdiendo las sayas. La segunda persona que las leyó fue la Rosa, la mujer del Pepe Fuster, que me pide tres veces que diga aquí que a San Antón le habían quitao la gaita y a San Sebastián los huevos, pero que este año se los han vuelto a poner. Mientras aprenden los del Relicario, habrá que tener paciencia y traer al gaitero de la Todolella y al chico del Camilo. Y a San Antón le han puesto los huevos y hasta crespillos, conejos y chinchillas.

Saturnino Colomer estaba jugando al guiñote en el Delicias a mediodía de un martes nublado cuando apareció por la puerta Javier Bardem el de los lunes al sol y se comió un bocata. Era el último día del año, y el artista se fue a pasar la nochevieja a Luco de Bordón. Eso dijo María, la hermana de Saturnino, que también leyó esto el mes pasado, y ya son tres.

Además de todo ha habido dos personas más que me han preguntado si era verdad lo del plástico que le mangaron al Tomás, con lo que ya van cinco, y la sexta persona fui yo, que siempre me lo leo a medias.

Hay quien dice que se ha comprado minas antitanque para colocar en las levadas de su huerto, harto de ver la proliferación continua de pisadas de gigante junto a su mejor verdura. La escalada defensiva llega hasta la casa de la villa. Me dicen que el ayuntamiento va a poner bombas lapa en los contenedores, con mayor carga en los de trascorrales, para que el gamberro que los mueva no haga más arcillos. Un testigo que ha visto las malezas dice que los tontainers van a volteras todos los fines de semana por las escaleras junto a la casa de las monjas. Asimismo dicen que el ayuntamiento va a poner metros de cuerda cerca de los baches y coladores que salen por todas las calles del pueblo, para que si se cae dentro un zagal lo pueda sacar rápidamente el primero que oiga gritos de auxilio. Pero también hay muchos baches en sendas y caminos. Por eso hay comentarios diciendo que el dinero que se están gastando en las obras del Museo más valdría que lo dieran para arreglar los caminos de la Escolana.

Y se oyen lamentos sobre la pena de no aprovechar mejor semejante torre que tenemos. Por las noches se ve el pueblo iluminadico de puntos amarillos, pero parece como si la torre se la hubieran llevado a lucirla en algún otro pueblo donde tengan más luces que en el nuestro. Está bien dejar la torre a quien sea, pero por lo menos a sanantón y a sanagustín que nos la devuelvan.

Ya estaba acabado y maquetado EL MASINO y ha venido apostas la Pili, nuera de la Joaquina del puente la agüera y vecina del presidente de la cooperativa del campo San Antonio, a pedir que ponga una cosa más en las Charradicas. Que la noche de los merengues hubo gente que se portó muy mal, y que no quiere decir quien en especial, pero que hubo uno que hasta le pegó una patada gorda en un sitio. Que al baile no se va a reñir, que se va a bailar, como hizo ella, que bailó más que las cantantes de la Camaleón.