Santa Engracia 2014 - Santolea

Un año más hemos conseguido reunirnos los santoleanos y ya van cuatro, desde que aquel 16 de Abril de 2010, nos juntamos por primera vez, diez amigos, a los que invitamos a unirse al grupo a los tres ingenieros que estaban trabajando en la obra de la Presa de Cola, del Pantano de Santolea, en una comida improvisada, en el Hostal de Castellote.

Aquella reunión fue el comienzo y donde se maduró la idea de trasmitir a todos los conocidos, la posibilidad de buscar una fecha cada año, donde poder volver a juntarnos, para poder recordar los momentos vividos, en un sábado cercano al 16 de Abril, día de nuestra patrona Santa Engracia.

Por mediación de la Asociación Cultural Santolea Viva y la colaboración de todos, al siguiente año 2011, conseguimos juntarnos 64 asistentes, que en 2012 fueron 107, 2013, 131 y este 2014, 114, a pesar de las dificultades que hay, para ponerse en contacto con hijos, descendientes y simpatizantes de este pueblo y que algunos no nos han podido acompañar, por problemas familiares y otros, por que ya no están con nosotros.

La reunión y comida se llevó a cabo el lugar de costumbre, donde no faltó la alegría y los saludos haciendo promesa de intentar continuar estos encuentros, intentando trasmitir a las nuevas generaciones el amor por la tierra y pueblo de sus antepasados.

Terminada la comida, una mayoría nos trasladamos al pueblo, para sobre sus ruinas comentar a los más jóvenes y a las personas que lo solicitaban, información de como era el pueblo y donde se encontraba la casa de cada familia, la Iglesia, la Escuela donde aprendimos lo poco que sabemos, recordando a aquellos niños y maestros, con los que tantas veces hemos compartido estudio y juegos.

Una parada obligatoria hicimos algunos de los concurrentes, en la Ermita de nuestra Patrona, donde nos vino a la memoria las muchas visitas que habíamos hecho a la misma.

En el siglo XVIII, seguramente el pueblo tuvo un momento de bonanza económica y se acometieron dos obras importantes para el mismo, la construcción de una iglesia que había sido quemada en una de las guerras y la del Calvario. La primera quedó suspendida las obras por falta de medios, quedando reducida su construcción a la que hemos conocido hasta la desaparición del pueblo, quedando de aquel primer proyecto como testigo, la base de la torre, sin terminar. La segunda se llevó a cabo tomando como patrón el de Alloza, construido unos años antes. En el se hicieron las 14 estaciones del Vía Crucis representadas en otras tantas capillas, las cuales fueron costeadas y mantenidas por la familias más acomodadas y en la parte más alta del mismo, la ermita de Santa Engracia.

Junto a la ermita se hizo la casa del ermitaño, para el cuidado de la misma y según tradición oral, la última ermitaña murió al incendiarse su casa, mientras su hijo de pocos años, corría al pueblo a pedir ayudada y sobre ella he hallado lo siguiente:

Casimira Hernández Peña, de 55 años de edad, natural de Torrecilla del Rebollar y vecina de esta, había fallecido a las seis de la tarde del día 23 de Mayo de 1908 en la Ermita de Santa Engracia, por quemaduras externas de 4º y 5º grado. Estaba casada con Francisco Sanz Zapater, de cuyo matrimonio hubo seis hijos, Mariano, Josefa, Dolores, Francisca, Mariana y Juan Sanz Hernández. Era hija legítima de Mariano Hernández y Pabla Peña, naturales de Torrecilla del Rebollar.

Hoy hemos hecho una visita a la maltrecha ermita de Santa Engracia y hemos recordado a esta ermitaña, que un día estuvo al cuidado de la misma. En la pared de lo que fue su casa, he colocado un cartel, recordándola y para conocimiento del que pase por allí.

José Aguilar Martí

26 de Abril 2014